EL POLIZON

Primera Parte




Era una noche oscura.

Levante lento el brazo, sentí arena en los ojos, escozor en los labios, y un mareo del tiempo agonizaba en mente, apenas podía mover un músculo, como si algo me lo impidiese, el pensamiento iba a cámara lenta por todo el cerebro, y llegue a la conclusión de que estaba muerto, o algo parecido.


De repente escuche voces lejanas, no sabía si habían pasado minutos u horas… apenas se percibía lo que decían, o tal vez su idioma era extranjero, me sentía débil, solo el sentido de oír trabajaba desde dentro. Que día era?


Oí suaves pisadas que se acercaban, ni muy rápidas ni muy lentas, sonaban como el eco cuando retumba, los latidos del corazón… tal vez? Una mano se poso en la carne, zarandeándome, casi me produjo dolor sin sentido, como si la sangre se me derritiese en la parte que apoyaba el cuerpo.


Su voz ronca me produjo un estruendo dentro de la cabeza inutilizando, bloqueándola.


Transcurrieron unos segundos que parecían eternos, sus dedos oprimieron esa vena gruesa que lleva el latido del corazón, pude sentir la palpitación, suave, lenta y bien pronunciada. Sentí como me elevaban y me arrastraban hacia algo mullido, la evidencia era como una especie de camilla, olía a madera vieja, me ataron con unas cuerdas y note el rasurar de la tierra, empecé a moverme, me maree y caí en un letargo, pesado… lento…

Ausente se fueron abriendo los ojos, entremezclándose olores e imágenes, todavía sentía el mareo en la sien, un rostro miraba fijamente, su velo enroscado solo permitía ver el brillante iris de color miel, dio tranquilidad a mis pulmones que poco a poco fueron sosegándose a las caricias que me producían.

Fotografia

M C N

Misk
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Segunda Parte




Al cabo de un rato

dos mujeres se presentaron con palanganas y agua caliente, de la que salía un vapor mentolado, desnudaron mi cuerpo y sentí ruborizarme, un elemento nuevo, algo sublime y expectante. Lavaron mi cuerpo con caricias de paños húmedos, y mientras se oía una melodía que de sus gargantas salía risueño y armonioso, pude relajarme mientras en lo cómico la sensación de frescor se apoderaba de mi pensamiento.

No se cuanto tiempo paso hasta que pude ser capaz de vestirme con aquellos telares de un sin fin de colores, tan llamativos como sublimes, no recuerdo tan apenas nada de mi, y por mucho que intente sentir el corazón, solo oigo un pequeño latido como el de un recién nacido, jugando bajo el pecho tímido y asustado.

Al asomarme al umbral, de aquella casita del telar, en verdad que fue hermoso el sentir el aire en la sien, un olor de recuerdos varios vino a mi mente en formas sin dibujos, y cerré los ojos apoyando mis manos en aquellas columnas que soportaban el techo, alguien vino por detrás sujetándome y yo sonriendo me apoye indexando el dolor…



Misk

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Tercera Parte




El claro día cegó por un instante mis ojos

y en ese relámpago de oscuridad, vino a mi, la imagen de alguien que me hizo sentir pleno, radiado, hermoso y tal vez… tímido, por sentir el placer de la información.

Mis primeros pasos eran defectuosos, las piernas a duras penas sostenían el peso de las extremidades, y el tronco perlado de mi piel, calentándose, bajo la tela sudaba al arreciar el sol en mis costuras, sentía ganas de vida, de aventurarme en ese mundo que mis ojos recorrían, no había todavía mucho dentro de mi, pero esas formas debían tomar color y sugerir a este alma nueva el camino a seguir…





Comienza la aventura de la vida.

Al recostarme de nuevo en la noche, me busque, mire mi cuerpo, los relieves, las heridas, ese dolor punzante y quise ir mas a lejos para encontrar de donde provenía. Las manos llagadas, las curvas retorcidas, el olor impregnadas en ellas, los sabores de la piel, lo que escondían. Pero por mucho que pensé que era lo que más temía, no pude encontrar respuesta más que en mis ojos, cuando contemple su ardor y su agonía.



Misk

Recuerdo un leve matiz, un sueño repetido, algo que de su sensación me deja intensamente solo, y al despertar busco entre esas sabanas, el perfume que me embriago, te busco? Me busco? En realidad lo invisible es la terminación.




Algo sobre mi



Soy disléxico, por eso mi mente distorsiona el tiempo, mi cuerpo y el corazón son de diferente color, a como yo lo veo en esta historia sin nación.


Enfrente un espejo casi en el oscuro rincón, grietas erosionadas y la madera de termitas invadida, pero el espejo frente a frente parecía un guerrero sublime y producía escozor en este pensamiento tan elevado.
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Todavía no estaba preparado para acercarme a el, mis ojos estaban naciendo, así como todas esas partes en que el cuerpo retoma lo cotidiano.
Mi mente nueva, mi frente limpia, solo quise dar
un leve matiz de tiempo a mi ser.

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El principio de la fresca mañana iba adentrándose sigilosa por la ventana y en mi sentir la piel tembló, de igual forma cuando soñé aquel rostro y los lívidos ojos, desenfrenados y siempre acercándose, como golpes en el corazón, unas veces sonreía y otras sus labios lloraban, sus pupilas centelleantes iluminaban el sueño, y aunque parezca irreal siempre mis manos buscaban, eternas su roce pero siempre desaparecía dejándome la ansiedad, la tristeza, el vació…



Misk

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2 Tarios:

1

Mimí dijo...

Un buen post para aprovechar la fotografia, todo sensaciones. ¿Crees que acabará teniendo ojos como los demás? O será como los de la sibila, ocultos y videntes detrás de una telaraña?

Abrazo intrigado

septiembre 03, 2009

2

Misk dijo...

Todo son Imprevistos, una aventura al azar, o quizas un augur, quien sabe Mimi, lo que el Destino le deparara.

idem
salud

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Empecé a notar mis manos como si una línea invisible fuera recorriéndoles por ambos extremos, llenas de polvo, de sed, tan cansadas y abrasadas de sol, y contuve el aliento mientras miraba cada surco sin memoria, me preguntaba de que fueron artesanas, si por el contrario obreras del martillo y la estaca, espere mientras jugaba con ellas, acariciándose mutuamente sentí la sensación de haber disfrutado de aquellos encuentros fortuitos, tan absurdas y tan tímidas, y tan amadas…


Cuarta Parte

Una mañana decidí adentrarme más en esa vida, llegar al horizonte que parte el mundo en dos, ese perfume que se impregnaba en mi ser como algo lejano y persistente, y envolvía el aire intensamente, pero que yo en mis miedos retrocedía y me escondía en aquel albergue o casucha destartalada, de maderas viejas y resinas resecas; Pero esa voz invisible que se escondía tras aquella línea lejana me llamaba, me susurraba, me atraía con un poder que en esta curiosidad mal sana invadía mi ser hasta mi corazón, como la salvia que fluye rauda en las venas, dándome la vida, la adrenalina, la sensación de estar vivo.

Durante el resto de la mañana no conseguía concentrarme en la pronta caminata hacía desconocidos lugares, los nervios del no saber si quería o no, las preguntas sin fin de que me iba a encontrar, estaba sufriendo antes de adentrarme en el nuevo mundo, porque sentía pavor a la irradiación de los pensamientos profundos.




Un presentimiento

Muchas veces me pregunte como había llegado hasta aquí, porque mis sentimientos difusos golpeaban fuerte cuando una imagen venía sin rostro o tal vez ese rostro se transformaba cada vez que venía?, no lo sé… pero yo sentía que siempre era el mismo cuerpo, el mismo corazón, los mismos pensamientos, el sentir, la adulación de la propia vida, la carisma del brillo de sus ojos, todo parecía igual y tan distinto… que me dolía el cuerpo y el corazón cuando desaparecía.


Quizás debía optar por dejar de lado mis sentimientos, dejar de ser, y tal vez pudiera conseguir aunque con distantes dolores pasar la vida sin tensiones, sin pasiones, sin amor... Algún día cuando yo me haya olvidado de ese significado, si se pudiese olvidar... que tantas veces decae en el atardecer, pueda caminar bajo el Sol sin abrasarme y mirar fijamente como cualquier ser humano... entonces sabre que la Muerte temerosa, única amiga, pudiera llevarme a un lugar de grillos y polillas, cuando tocan la luz y mueren cantando a la noche el surgimiento de la extenuación.
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Fin
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Misk
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